Durante décadas, para una empresa, adquirir un equipo de impresión era un proceso pesado. El modelo tradicional, a menudo llamado arriendo de impresoras o simplemente compra, significaba un gran desembolso inicial, riesgos de obsolescencia y la pesadilla de gestionar averías y la compra constante de consumibles. Hoy, ese modelo ha quedado obsoleto.
La evolución hacia el renting de impresoras ha transformado este servicio en una solución integral de gestión documental. Ya no pagas solo por la máquina; pagas por un servicio de impresión garantizado que incluye mantenimiento preventivo, soporte técnico y suministro automático de tóner. Esto permite a las empresas concentrarse en su negocio, mientras un coste fijo y predecible se encarga de la eficiencia empresarial y la operatividad total. Esta transición ha sido especialmente crucial al introducir tecnologías más avanzadas.
De las Copias Lentas y Caras al Alto Rendimiento: La Revolución de las Impresiones Láser
En el pasado, las impresiones láser estaban reservadas para grandes corporaciones debido a su alto costo de adquisición y mantenimiento complejo. Las empresas pequeñas y medianas dependían de equipos lentos y propensos a fallos. La llegada del renting cambió este panorama radicalmente.
Este modelo ha democratizado el acceso a la impresora láser profesional de alta velocidad. El renting elimina la barrera del precio inicial, permitiendo a cualquier oficina acceder a la tecnología que garantiza miles de páginas por minuto (PPM) con un bajo coste por página (CPP). El antiguo arriendo de impresoras obligaba a las empresas a asumir el coste de reparación y la depreciación de las máquinas láser; sin embargo, el renting traslada esos riesgos y gastos a la empresa proveedora.
Hoy en día, las impresiones láser modernas, integradas en soluciones multifunción, no solo son rápidas, sino también seguras y eficientes. La evolución del servicio ha permitido que el alto rendimiento de las impresiones láser sea accesible y sostenible para cualquier tamaño de negocio.
El Salto al Gran Formato: Cómo el Renting ha Democratizado la Impresión Plotter Profesional
Si la impresión láser transformó la oficina, el renting hizo lo mismo con el sector del diseño, la arquitectura y la ingeniería. Históricamente, la impresión plotter profesional era una inversión monumental. Los plotters de gran formato requerían presupuestos millonarios y un expertise técnico para su mantenimiento, lo que obligaba a muchas empresas a externalizar sus trabajos grandes.
Gracias a la evolución hacia el renting, el acceso a la impresión plotter se ha simplificado enormemente. Las empresas ahora pueden alquilar un equipo de última generación, como un Plotter Epson, por una cuota fija. Esta cuota no solo cubre el hardware, sino también los cabezales, tintas y el servicio técnico especializado, algo vital para la maquinaria de precisión.
El renting ha permitido que la impresión plotter de alta calidad (para planos, cartelería o lienzos) se integre como un coste operativo más. Este cambio no solo ahorra dinero a largo plazo, sino que también otorga a las empresas la autonomía y la rapidez necesarias para manejar proyectos internos sin depender de terceros, consolidando al renting de impresoras como la solución definitiva para la eficiencia en todos los ámbitos de la impresión profesional.

